Y cada uno caminaba en derecho de su rostro; hacia donde el Espíritu diera que anduviesen, andaban; cuando andaban, no se volvían.
(Sagradas Escrituras)
Cada uno iba de frente hacia adelante; adondequiera que iba el espíritu, iban ellos, sin volverse cuando andaban.
(Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy)